Un detalle por San Valentín

Reconozco que jamás he celebrado San Valentín, siempre me ha parecido una celebración artificial con más valor comercial que cualquier otro , pero la verdad es que la historia ( o leyenda ) que hay detrás del patronazgo de este santo para todos los enamorados tiene muchos siglos y una razón de ser. Según una de las historias San Valentín era un sacerdote del siglo III que vivió en la era del emperador  Claudio II, dirigente que había prohibido el matrimonio entre jóvenes pues pensaba que sin familia eran mejores soldados, algo que el sacerdote consideraba injusto y por ello celebraba los matrimonios en secreto. Este desafío le costó la cárcel y posteriormente su ejecución el 14 de febrero del año 270 (después de muchos avatares).
Esta, como tantas otras celebraciones que han llegado hasta nuestros días se mezclan entre sí con historias paganas tales como la adoración al dios Eros (griego) o Cupido (romano) o aquellas de los países nórdicos en los que se conmemoraba esta fecha como día de los enamorados por ser la época en la que se emparejan los pájaros... sea como fuere el 14 de febrero es el día de los enamorados.
No me puedo creer que sea yo quien hable de celebrar este comercial momento, pero la verdad es que si las prisas del día a día y la rutina nos llevan a no cuidar nuestra relación no está de más dedicar un momento especial a esa persona que comparte con nosotros carreras diarias, alegrías y tristezas , dificultades y éxitos...un pequeño detalle siempre resulta agradable, aunque lo ideal sería no tener que buscar un día en el calendario.

 Una libreta de cosido japonés muy sencilla de hacer y con un detalle de corazones.

Una bolsa de tela para guardar pequeñas cosas o para llevar zapatos en la maleta

Unos detalles en el desayuno muy adecuados para este día .